En la oficina yo fui el encargado de organizar charlas en las escuelas, escribir los perfiles de los intercambios que van a llegar en agosto y escribir el manual de autofinanciamiento para ayudar conseguir el dinero faltante con varias ideas a los chicos argentinos que quieren viajar con YFU. ¡Gracias Nico y Arantxa por ayudarme tanto con todo eso!
También escribí una presentación de Hungría, así que quisiera compartirlo con vos mi Querido Lector que todavía no conoces tanto mi país:
¿Jugaste alguna vez con el cubo mágico de Rubik? ¿Viste volar un helicóptero en el cielo? o ¿Prendiste en tu vida fuego con un fósforo? Todos estos inventos son el trabajo de un pueblo que vive en el corazón de Europa, en la cuenca de los Cárpatos, de una nación, cuya historia da pruebas de la continua renovación, al tiempo que conserva sus tradiciones. La unión de las familias, la frescura y la vejez de sus ciudades y la riqueza de sus tradiciones folclóricas son apenas algunos íconos. Su historia es igual de fascinante que sus paisajes. Viviendo con una familia húngara aprenderás sobre una cultura diferente y rica, un idioma de una rama muy particular a la cual también pertenecen el finés y el estoniano. Entonces qué estás esperando para irte de intercambio a Hungría?
Características distintivas:
Hungría es un país con un territorio chiquito que apenas alcanza la superficie de Neuquén y viven menos personas en él que en la provincia de Buenos Aires. A pesar de su tamaño posee una historia, unas tradiciones y una cultura fascinantes y extremadamente ricas.
Hungría se encuentra en el corzón de Europa: tiene frontera con siete paises por eso se caracteriza por la diversidad de pueblos que viven en ella. Hoy en día la interculturalidad convive sin problemas, creando tradiciones y festejos increíbles, donde el respeto y la tolerancia son valores primordiales y la música es la forma de expresión más común.
Uno de los tesoros únicos de este país es su cantidad de Patrimonios de la Humanidad, entre los que se incluyen, la orillas del Danubio, el barrio del Castillo de Buda, la avenida Andrássy, la Plaza de los Héroes y el Metropolitano del Milenio, el segundo más antiguo del mundo.
“El húngaro es el único idioma que el diablo respeta” dice el protagonista de la novela Budapest de Chico Barque. Hay varias leyendas y teorías sobre su dificiltad tremenda y de su origen misterioso. Pero no te preocupes porque todos los chicos que van a Hungría, durante su año de intercambio lo aprenden muy bien y así logaran el respeto del diablo mismo. Actualmente la teoría lingüística más aceptada dice que el húngaro o magyar proviene de los Urales, de donde en el siglo IX d. C. las tribus magiares emigraron hacia lo que es hoy Hungría y fundaron uno de los reinos cristianos más antiguos de Europa en el año 1000.
Si ya estamos hablando de los húngaros, también quiero contarte algo de la colonia húngara de Buenos Aires. Primero que nada todo el respeto para ellos por conservar en este nivel increíble el idioma y las tradiciones húngaras a pesar de que ya es la tercera y cuarta generación que nace y vive tan lejos de su patria. El grupo de folclore húngaro cuyo miembro soy yo también tiene ensayos cada miércoles y domingo. Estamos preparándonos a full para ir al XII. Festival de Folclore Húngaro en America del Sur, así que les estoy enseñando una coreografía de danza a los hombres. Nos hicimos muy buenos amigos desde el primer momento que nos encontramos en un acto de 25 de marzo para recordarnos a una de las revoluciones más importantes de la historia húngara. Después fuimos a un teatro alternativo que se organiza en un techo de una casa… es un centro culturar verdadero donde tocan bandas nuevas de jóvenes talentosos, hacen teatros, charlas y debates cada sábado. Era una experiencia inolvidable de nuevo. ¡Gracias por llevarme chicos!
Una de mis mejores amigas húngaras, Eszter, que actualmente trabaja en YFU Uruguay y antes hizo su pasantía en YFU Chile me visitó en la semana de las elecciones presidenciales para ir a votar a la embajada y para conocer Buenos Aires. Ella se quedó totalmente entusiasmada y muy emocionada al entrar al Club Húngaro y escuchar nuestro idioma hablado perfectamente por argentinos a pesar de los 12.000 kilómetros de distancia de nuestro hogar. Pasamos una semana inolvidable en la gran ciudad de Buenos Aires…
Muchísimos agradecimientos para Edi, el profe y jefe del grupo de danza húngaro, por todo lo que hizo por mí y por Eszter, por abrir las puertas de su casa, por cocinar tan rico y por ser una persona tan maravillosa.